¿QUIÉN ES EL ABUSADOR?
El abusador es un adulto o adolescente que en general es conocido por el niño (familiar, vecino, quien lo cuida, conocido de la familia etc.), aunque también puede suceder casos en los que el agresor sea un total desconocido, aunque no es lo habitual.
Aunque en la gran mayoría de los casos el abusador es hombre, también las mujeres abusan sexualmente de niños y adolescentes.
Estas personas suelen ser aceptadas, queridas, respetadas, con una vida "normal", que incluso han formado familia, es decir son personas que aparentemente no podrían dañar a un menor, y justamente por estas características es que a veces es tan difícil identificarlas.
¿CÓMO ACTÚA EL ABUSADOR?
El abusador manipula la confianza que el niño le tiene, y a través de la seducción (regalos, premios, preferencias, etc.), o amenazas, lo incita a participar en actividades sexuales que el abusador muestra al niño como juegos o comportamientos normales. El agresor utiliza la confianza, la familiaridad, el engaño, la sorpresa y el cariño del niño como estrategias más frecuentes para someterlo a sus deseos.
Más allá del placer sexual y erótico que siente el agresor, este se gratifica mediante el sometimiento del niño, el sentimiento de poder es el que lo motiva.
El abuso no es un episodio aislado sino, un proceso que se desarrolla en el tiempo (puede durar varios años) y que en general se da a lugar en la casa del niño o en la del abusador.
El abusador amenaza y chantajea y denigra al niño para que éste guarde silencio y no cuente lo que le está sucediendo, con frases como: "si lo cuentas tus padres se van a enojar contigo", "es tu culpa, tú te lo buscaste", "si dices algo voy a lastimar a tu familia", "este secreto especial queda entre tú y yo sino los demás se van a poner celosos y se enojarán contigo", "eres un idiota que no sirve para nada y nadie te va a creer", etc.